Now Reading
Las verduras, las frutas y los granos mantienen a su corazón en funcionamiento

Las verduras, las frutas y los granos mantienen a su corazón en funcionamiento

Rate this post

Si necesitaba más pruebas de que las frutas, las verduras y los granos integrales son buenos para usted, un nuevo estudio encuentra que podrían reducir las probabilidades de insuficiencia cardiaca en un 41 por ciento.

Al contrario, la llamada dieta sureña, que se enfoca en carnes, alimentos fritos y procesados y mucho té dulce, se vinculó con un aumento del 72 por ciento en el riesgo de insuficiencia cardiaca.

“Coma más plantas, limite la carne roja y procesada”, planteó la investigadora principal, la Dra. Kyla Lara, cardióloga en la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota.

Lara advirtió que este estudio no puede probar que la dieta provoque o prevenga la insuficiencia cardiaca, solo que están vinculadas.

Casi 6 millones de adultos estadounidenses sufren de insuficiencia cardiaca, y se prevé que ese número aumente junto con el envejecimiento de la población. La afección se produce cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre como para satisfacer las necesidades del cuerpo.

Los pasos para prevenir la insuficiencia cardiaca incluyen no fumar, mantener la presión arterial bajo control, mantener un peso sano y comer alimentos saludables.

Lograr que las personas coman de forma más saludable requiere que se eduquen sobre los beneficios de las dietas basadas en las plantas y que tengan acceso a alimentos saludables con un costo bajo, apuntó Lara.

“La carne animal no es necesaria para una dieta nutritiva, en términos de la promoción de la salud y de la calidad de vida”, señaló. “Ahora es el momento de adoptar una dieta basada en las plantas, que será el futuro de la salud”.

En el estudio, Lara y sus colaboradores recolectaron datos sobre más de 16,000 hombres y mujeres, de a partir de 45 años, que participaron en un gran estudio de EE. UU. sobre el accidente cerebrovascular. Ninguno de los participantes tenía una enfermedad cardiaca al inicio del estudio. Los participantes completaron un cuestionario que les preguntaba sobre su dieta.

Las dietas se clasificaron en cinco tipos:

De comodidad, que abundaba en carnes, pasta, comida mexicana, pizza y comida rápida.
Basada en las plantas, que incluía verduras, frutas, frijoles y pescado.
Grasas y dulces, que era rica en postres, pan, alimentos dulces para el desayuno, chocolate y otros azúcares.
Sureña, rica en alimentos fritos, carnes procesadas, huevos, grasas añadidas, y bebidas endulzadas con azúcar.
Alcohol y ensaladas, que abundaba en vino, licor, cerveza, verduras de hojas verdes y aderezo para la ensalada.
Tras casi nueve años de seguimiento, 363 participantes desarrollaron insuficiencia cardiaca.

El beneficio de la dieta basada en las plantas fue significativo, pero tras tomar en cuenta factores como el peso, el tamaño de la cintura, la hipertensión y el colesterol alto, el efecto negativo de la dieta sureña no siguió siendo estadísticamente significativo, apuntó Lara.

Quizá el aumento en el riesgo de insuficiencia cardiaca en ese grupo se debiera a la obesidad y al exceso de grasa corporal, o a otros factores, planteó.

Ninguna de las otras dietas mostró una asociación estadísticamente significativa con la insuficiencia cardiaca, y no se observó una asociación entre ninguna dieta y el tipo de insuficiencia cardiaca que desarrollaron, anotaron los investigadores.

Los hallazgos se publicaron en la edición del 22 de abril de la revista Journal of the American College of Cardiology.

“Nuestro estilo de vida, por ejemplo lo que comemos, si somos físicamente activos, el tabaquismo o el vapeo, puede contribuir de forma significativa a un corazón que funcione mal, lo que a su vez afecta nuestra calidad de vida y en última instancia qué tan pronto morimos”, indicó Samantha Heller, nutricionista clínica sénior en el Centro Médico de la Universidad de Nueva York, en la ciudad de Nueva York.

Se ha mostrado que las dietas basadas en plantas reducen en riesgo de enfermedad cardiovascular, deterioro cognitivo [del pensamiento], diabetes tipo 2, varios tipos de cáncer, depresión y obesidad”, apuntó Heller, que no participó en el estudio.

Para una salud óptima, las personas deben reducir las comidas fritas, el queso, la comida rápida y la comida basura, y las carnes procesadas y rojas, dijo.

“Es triste y frustrante cuando veo a pacientes que podrían literalmente salvar sus vidas eligiendo opciones más saludables, pero que optan por una hamburguesa con papas fritas”, añadió Heller.

Una hamburguesa con queso, unas papas fritas y un batido parecen inocuos, pero pueden contener más de 2,600 calorías, 65 gramos de grasa saturada y 3,400 miligramos de sal, añadió.

Heller aconseja a las personas que incluyan como mínimo un alimento rico en fibra en cada comida. “La fibra dietética solo se encuentra en los alimentos vegetales, como la espinaca, las naranjas, la quínoa y las lentejas”.

También intente cenar sin carne dos o tres noches por semana, por ejemplo con un burrito de verduras asadas y frijoles negros, pasta primavera o un revuelto de edamame y verduras frescas, sugirió.

Click to read in English:Veggies, Fruits and Grains Keep Your Heart Pumping

View Comments (0)

Leave a Reply

Your email address will not be published.

Copyright © 2014 - 2019 VIVEMICHIGAN | All rights reserved.

Scroll To Top