“Dos tercios de hogares de Grand Rapids ya respondieron al censo, igualando tasa total de auto-respuesta de 2010”: Lou Canfield

El censo de 2020 está en marcha con algunos ajustes operativos debido a la crisis de salud pública de COVID-19, y Grand Rapids no es una excepción. El Comité de Conteo Completo “Todos Cuentan” Grand Rapids 2020 ha estado trabajando diligentemente para obtener un conteo completo y preciso de todos los residentes que viven en la ciudad.

La emergencia pública alteró los esfuerzos que hasta un momento se habían centrado en el acercamiento a personas de barrios clave. “Nos estábamos enfocando en vecindarios donde históricamente ha habido una tasa de participación más baja. Íbamos a muchos eventos y reuniones comunitarias, pero todo tuvo que detenerse a mediados de marzo”, dijo Lou Canfield, el Coordinador del Comité de Conteo Completo del Censo 2020 para la ciudad de Grand Rapids.

Como respuesta, el comité hizo una transición a canales digitales como las redes sociales, la publicidad y las vallas, para alentar a los residentes a participar y conocer los beneficios de ser contados. Hasta ahora, la estrategia ha valido la pena. “Solo en Grand Rapids, aproximadamente dos tercios de los hogares ya han respondido. Y con fines de comparación, esta fue la tasa de auto-respuesta para todo el 2010”, comentó Canfield.

Actualmente, el proceso de recopilación de datos de auto-respuesta en línea, por teléfono y por correo se ha extendido hasta el 31 de octubre en todo el país. “A medida que se amplíe el plazo, vamos a seguir trabajando, enfocándonos en vecindarios particulares con porcentajes más altos de casas de alquiler y familias inmigrantes. Esos vecindarios tienden a tener tasas de respuesta más bajas”, agregó.

Con respecto a las comunidades de inmigrantes, especialmente a los latinos, el comité ha estado trabajando estrechamente con algunas organizaciones como la Cámara de Comercio Hispana y el Centro Hispano para alentar la participación. “La tasa de participación actual de los hispanos es más baja, y la tasa de auto-respuesta es más baja que en otras partes de la ciudad. Los residentes hispanos son un poco escépticos sobre el censo, pero creo que está bastante cerca, y es por eso que estamos enfocando nuestros esfuerzos para llenar este vacío “.

En estas comunidades han estado tratando de compartir el mensaje de que existen protecciones legales sólidas para los datos del censo. “Esta información no se puede divulgar a nivel individual fuera de la Oficina del Censo durante 72 años, y solo se puede utilizar con fines estadísticos. Además, el censo no pregunta sobre la ciudadanía o el estado de inmigración. Sí pregunta sobre la raza y el origen étnico. Estas respuestas solo se usarán para pintar un retrato de nuestra nación y las comunidades “, comentó Canfield.

Finalmente, concluyó que la pandemia de COVID-19 no ha disminuido el valor del censo, sino que por el contrario destacó la importancia de asignar los recursos correctos a nuestra comunidad según el conteo.
“Este dinero se destina a hospitales, escuelas y a programas de familias, adultos mayores y niños, que son de extrema importancia en emergencias como la que enfrentamos”.

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