La misión de hacer que el talento tecnológico sea más diverso sigue en marcha
Una agencia local de talentos tecnológicos latinos se convirtió en una organización
sin fines de lucro y se renombró como Code on Wheels
Code on Wheels (CoW) es la próxima iteración de Loop Coding Center, una empresa que Luis Pérez ayudó a fundar en 2017 para abordar la brecha de diversidad en la industria tecnológica del oeste de Michigan. Como organización sin fines de lucro, la organización aún está comprometida con mejorar la brecha de diversidad en la industria tecnológica al ofrecer programas de educación tecnológica a estudiantes con poca representación.
“Comenzamos Loop Coding Center, LLC sin una visión, recursos o conexiones, pero sabíamos que se necesitaba un cambio”, dijo Pérez.
Según Pérez, la industria tecnológica del oeste de Michigan en 2018 estuvo dominada por un 86 % de caucásicos, con un 27 % de hispanos y un 23 % de afroamericanos. Además, el 79% de los profesionales de tecnología en el área eran hombres y el 21% eran mujeres.
Pérez dijo que a él mismo le resultó difícil aprender a codificar en la escuela secundaria y descubrió que era parte de un problema de diversidad más grande en el que no se enfocaban muchas organizaciones del oeste de Michigan.
Desde su fundación, Loop Coding Center comenzó a comprender mejor dónde encajaba en el ecosistema tecnológico e incluso ganó algunos seguidores en el camino. Pero los fundadores se dieron cuenta de que ser una empresa con fines de lucro no se alineaba con su misión de acceso equitativo a las habilidades tecnológicas, por lo que en junio de 2021 la organización cambió su estatus legal a sin fines de lucro y se renombró Code on Wheels.
La transición a una organización sin fines de lucro tomó alrededor de un año para adquirir el título y obtener los archivos legales y financieros.
“Cuando comenzamos, estábamos muy ansiosos e ingenuos acerca de lo que se necesitaría para lograr lo que nos propusimos hacer”, dijo Pérez. “Avance rápido unos años, y ahora entendemos que solos nunca cerraremos la brecha de diversidad en el campo de la tecnología. Se necesitará un pueblo, tiempo y dinero para hacerlo.
“Entendemos que nuestros programas no les darán empleos a los jóvenes en tecnología por sí solos, pero les abrirá puertas y los expondrá a nuevos temas que de otro modo no tendrían la oportunidad de aprender”.
CoW tiene cuatro programas:
Los talleres de exploración son para organizaciones que desean implementar una clase de codificación pero no están seguras de comprometerse con una serie de clases. CoW organiza una sesión de codificación gratuita de tres horas con los estudiantes, recopila datos y trae a la organización a la sesión, para que pueda familiarizarse con el estilo de enseñanza de CoW para ver si encajaría bien antes de comprometerse con las clases.
Las clases de codificación son más complicadas, pero se pueden seleccionar para satisfacer las necesidades de una organización. Pérez dijo que CoW ya ha creado diferentes currículos y ha utilizado el marco tecnológico, pedagógico y de conocimiento del contenido (TPACK) para modificar los currículos sin perder elementos clave.
El programa de alfabetización tecnológica se creó durante la pandemia cuando CoW recibía solicitudes para enseñar a los adultos cómo usar tareas informáticas básicas y se ha expandido para incluir programas para jóvenes.
El CoW Club nació de la idea de mantener a los estudiantes anteriores comprometidos sin necesidad de comprometerse completamente con otra clase. Cualquiera que complete una clase de codificación CoW es elegible para unirse al club y continuar aprendiendo sobre tecnología.
CoW se centra principalmente en el oeste de Michigan, pero Pérez dijo que la organización está probando un nuevo servicio para compartir sus planes de estudio y experiencia con otras organizaciones y escuelas y obtener una audiencia más amplia.
“Si bien no hemos promocionado oficialmente este nuevo servicio, estamos en conversaciones con una organización en México, por lo que estamos seguros de que esto será muy beneficioso para múltiples socios futuros”, dijo Pérez.
Code on Wheels es una organización pequeña con grandes aspiraciones, y todos los involucrados tienen un trabajo de tiempo completo fuera de sus responsabilidades. La organización depende en gran medida del trabajo por contrato y voluntario y actualmente cuenta con 11 miembros que trabajan en diferentes áreas de la organización.
De esos 11, cuatro son miembros de la junta: Pérez, quien también trabaja en Steelcase como ingeniero de aplicaciones, es el presidente y presidente de la junta; Geraldo González, cofundador de Aztech.us, es secretario y codirector de programas; Joe Royston, desarrollador senior de DIG Solutions, es codirector de programas; y Ángel Barreto, cofundador de Aztech.us, es el líder de avance.
Uno de los elementos clave para el éxito de CoW son las asociaciones estratégicas, como socios financieros, socios comunitarios y socios de programas, que se alinean con la misión de CoW.
Los socios financieros ayudan a pagar los programas, por lo que los padres y los estudiantes no tienen que pagar nada, y los socios educativos ayudan a encontrar estudiantes y organizar programas en sus ubicaciones.“Comienza con una conversación para comprender mejor el tipo de relación que imaginamos para ambas organizaciones”, dijo Pérez.
Algunas de las asociaciones de CoW incluyen la Universidad Estatal de Michigan, las Escuelas Públicas de Grand Rapids, el Centro Hispano del Oeste de Michigan, los ministerios Start Garden y Roosevelt Park.
Más información está en codeonwheels.org.
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